Me llena de orgullo y satisfacción

Blogueros, familiares, amigos, Sevillistas todos (o no)...

Llega un tiempo de parón en lo que al fútbol se refiere, hasta que la Copa no vuelva allá por el tercer día del nuevo año y a cuyos rivales conoceremos mañana,  el balón se para y da paso a unas fiestas, si me dejan catalogarlas así, mágicas.

Digo mágicas por la razón en la que el balón se para y deja paso a momentos de los que pocas veces, por unas cosas o por otras, puede uno disfrutar poco. Reuniones familiares, reencuentros con viejos amigos, volver a ver a ese que viste ayer o antes de ayer...

Digo mágicas porque son fechas que tanto para mayores como para los más pequeños, llegan llenas de ilusión, y, aunque en los últimos años la crisis impida a la gran mayoría disfrutar como se debería, se aprovecha lo que se pueda para hacer de cada momento el más mágico.

También digo mágicas porque en estas fiestas suelen pedirse millones de deseos, de los cuales, cada uno tendrá los suyos propios, pero, ya que estamos, focalizando un poquito en lo que es la gran familia de la que formo parte, pediría una blogosfera Sevillista más unida que nunca, porque, tenemos que tener presente que, allí arriba, desde donde nos miran Sevillistas ilustres como Ramón Sánchez-Pizjuán, Arza o el mismísimo Antonio Puerta, también nos miran desde sus respectivas estrellas, últimamente más relucientes que nunca, Sevillistas que hicieron mucho por todo esto que hoy en día somos, don Agustín Rodriguez y don Giulio Guerrera, ellos con su recuerdo también harán mágico todo esto.

No soy el Rey de España, por lo tanto, no quiero ser repetitivo, pero, permitidme que acabe con una de sus frases tradicionales además de reiterarme en dejaros el mayor de los deseos, incluso en lo deportivo, pero, formar parte de la familia que formo parte, tener los amigos que tengo, y, por supuesto, compartir lo que comparto con muchos de vosotros gracias a que la red me permite hacerlo y a que a vosotros no os importe, así que, con todo ello y pidiendo que la salud nos respete a todos por encima de todas las cosas, os dejo con la coletilla de Su Majestad, porque...

Me llena de orgullo y satisfacción.