AMBICIÓN SIN LÍMITES
La situación del Real Zaragoza ha dado un giro casi de 180º desde que el Sevilla FC visitara la Romareda el pasado mes de Noviembre. Y es Manolo Jiménez, ex-entrenador del conjunto hispalense, el responsable principal de este cambio.
Si bien a efectos clasificatorios la situación es similar (en aquella ocasión a punto de entrar en descenso, en ésta cada vez más cerca de salir de él), las sensaciones son drásticamente diferentes. Cuando los maños cayeron por 0-1 en el partido de la primera vuelta, la impresión generalizada en la capital aragonesa era de que el equipo era incapaz de ganar a nadie. Ahora es totalmente al contrario: después de vencer consecutivamente a Valencia, Atlético y Sporting; y ofrecer una más que digna imagen contra el Barça, la gente confía en que se puede derrotar a cualquiera que se ponga delante.
Imagen correspondiente al partido de ida
Ese mismo sentimiento impera en un vestuario revitalizado con la llegada de Jiménez, que ha tenido que ejercer simultáneamente como técnico, psicólogo y portavoz. El andaluz se ha metido a la afición en el bolsillo en pocos meses. Acertado con sus decisiones en el campo y con sus palabras en la sala de prensa, todo parece andar mejor desde su llegada. Este jueves regresa a la que fue su casa con la idea de llevarse 3 puntos en el bolsillo que permitan aumentar la esperanza, pero sin perder la prudencia. Lo hará en principio sin sentarse en el banquillo, tras ser expulsado por Turienzo Álvarez la pasada jornada, aunque su sanción ha sido recurrida y podría serle retirada.
Pero Manolo no ha sido el único artífice de la remontada blanquilla. Y es que la plantilla, que también ha sufrido numerosas alteraciones respecto a la de la primera vuelta, también ha tenido mucho que ver.
La única baja negativa ha sido la del que fuera capitán hasta su salida, Leo Ponzio. Por lo demás, las salidas de Juárez, Meira y Antonio Tomás (que llegó en invierno y no tardó en marcharse) suponen un lastre perdido, y las altas han sido en su mayoría muy acertadas.
A destacar sobre todo la llegada de Apoño, quien con sus goles lograra 6 importantes puntos para el equipo en las últimas jornadas, sin olvidar las incorporaciones de Álvarez (por fin un lateral derecho puro), Dujmovic, Aranda y Obradovic (que con la salida de Juárez pudo recobrar su ficha y ocupar la plaza vacante de extracomunitario). Como último apunte respecto a los actuales integrantes de la plantilla, el mexicano Pablo Barrera sigue formando parte de ella pero hace mucho que no entra en los planes del técnico.
A pesar de la ola de optimismo y esperanza que se ha adueñado del Real Zaragoza, el partido del Pizjuán se percibe por gran parte de la hinchada zaragocista como el más complicado de los que restan, y los aficionados a las matemáticas no cuentan con puntuar allí en sus cábalas para la salvación. Por ello, cualquier punto logrado será bien recibido, pero asimismo existe la convicción de que el equipo saltará al verde en busca de la victoria.
Y es que el actual Zaragoza necesita puntos como el comer y, por primera vez en toda la temporada, se ve capaz de conseguirlos. La ambición maña no conoce límites ahora mismo.
ALINEACIÓN PROBABLE: Roberto; Álvarez, Lanzaro, Paredes, Obradovic; Pintér, Zuculini; Apoño, Luis García, Lafita; Postiga.
Alternativas más posibles: Mateos por Paredes, Dujmovic por Zuculini, Micael por cualquiera del mediocampo, Aranda por Postiga.
Bajas: Abraham (sanción recurrida, a la espera de decisión del Comité).
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