Beita; El gol tatuado en las venas

Otra vez, y las que hagan falta, seguimos actualizando este blog en cuanto a contenido del Sevilla Femenino de cara a tenerlo todo listo para la próxima temporada.

En esta ocasión, me voy a permitir el lujo de hablar de alguien que, valga la redundancia, me gusta más como habla sobre los terrenos de juego, fuera aparte de su personalidad, que, aunque la conozca de poco, demuestra mucho estando ahí siempre a disposición de todo el que necesite algo.

Si el otro día hablamos de quien dio el pase de ese último gol del ascenso, hoy hablamos de la que marcó el tercero y el primero además de muchos otros. Hoy hablamos de alguien que vino de Badajoz para hacer más grande al club Nervionense con su acierto de cara a gol, palabra tatuada en sus venas desde siempre, Beita.

Como en anteriores ocasiones, siempre me gusta elegir una imagen que represente de alguna manera el post y lo que se escribe en él, y, en esta ocasión, está claro que hablo de la capacidad de cara a gol de la jugadora extremeña, pero, eso también hay que verlo desde dentro.

Este equipo ha demostrado ser siempre una piña, y muestra de ello es el gesto que ya contábamos el otro día con el post de la capitana María Suárez, a la que de paso le doy las gracias por hacer llegar por otras vías este foto que pude rescatar, donde destacábamos el buen hacer de la jugadora pacense a la hora de animar a seguir a nuestra número cinco, alguien que, quizás, haya hecho de ese dorsal 8 que porta en la bonita camiseta blanquirroja, una futbolista/persona más fuerte y con más hambre y confianza de cara a superarse a sí misma, con ganas de morder bien fuerte.

De cara a primera, por muy difícil que parezca la vuelta a la categoría por el tema de rivales fuertes, el Sevilla FC ha hecho un enorme fichaje desde dentro, como otras muchas joyas que poseemos en este femenino, con Beíta y esa cantidad de goles aportados para la causa Sevillista en esta temporada, algo que está al alcance de muy pocos, al igual que la ayuda con la que ha contado para materializar todos y cada uno de esas jugadas.

Pocas he visto yo como Beíta, y no sólo de cara a gol. Ya he dicho antes que, desde el primer momento, siempre se ha portado de maravilla con los que, de alguna manera, hemos querido saber también de su rendimiento, siempre encima, apoyándolas en todo momento. Ha estado siempre ahí, incluso se llegó a ofrecer para colaborar en lo que hiciera falta de cara a las eliminatorias del filial femenino, y es que, como bien decía el compañero Selu desde El Sevillista Radio en la última retransmisión, esto, al fin y al cabo, es una gran familia.

Personalmente, espero escribir muchas crónicas victoriosas el año que viene, y, también, contar que muchos de esos goles han sido de esta gran futbolista y mejor persona.

 Beita, jugadora que hizo bien el club en traer en su tiempo, ya que, con ella no sólo se traía gol, sino que también se traía a una jugadora capaz de ganarse al vestuario, haciendo de ella una líder más del equipo. 

Beíta; El gol tatuado en las venas.